El desafío
General Motors (GM) quería ampliar las operaciones en su complejo de Silao, México, pero la disminución de los pozos de agua en la región requería un enfoque más sostenible del agua.
General Motors (GM) quería ampliar las operaciones en su complejo de Silao, México, pero la disminución de los pozos de agua en la región requería un enfoque más sostenible del agua.
Diseño e implantación de un sistema de reciclaje y reutilización que pudiera tratar las aguas residuales y hacerlas aptas para los procesos de fabricación.
El nuevo sistema de GM puede reciclar y reutilizar el 85 % de las aguas residuales y reducir a la mitad la extracción diaria de agua subterránea del complejo, además de aumentar las operaciones.
de reducción de la extracción diaria de agua subterránea
Mientras GM planeaba ampliar su planta de fabricación en Silao, Guanajato, México, los niveles de agua en los pozos de la zona estaban en descenso. Los responsables reconocieron lo que el aumento de las operaciones podía significar para la sostenibilidad a largo plazo en esta región con estrés hídrico. Traer nuevos empleos a la zona y proteger el medio ambiente significaba innovar la relación de la instalación con el suministro de agua local.
Para crear un crecimiento sostenible, se necesitaba un sistema integral de reciclaje y reutilización, similar al de las instalaciones de la empresa en San Luis Potosí, su primera planta de vertido cero de líquidos. Y aunque esa instalación proporcionó un modelo de reutilización satisfactoria, no sería tan simple como recrear la red en Silao. El complejo tenía sus propias necesidades únicas de agua que considerar.
Los Arcadianos ayudaron a GM a trazar el camino ideal mediante la dirección de la evaluación de viabilidad, el diseño y la construcción de un nuevo sistema de reciclaje de aguas residuales. El equipo se hizo cargo de guiar la aplicación de la tecnología y la estrategia necesarias en el tratamiento de las aguas residuales para su reutilización en los procesos de fabricación.
Ahora, el complejo ampliado produce más y consume menos. El 85 % de las aguas residuales se reciclan y se reutilizan en los procesos de fabricación, lo que permite ahorrar 900.000 litros de agua cada día. Los avances reducen a la mitad la tasa de extracción diaria de aguas subterráneas, lo que preserva el agua tan necesaria para la comunidad y crea a la vez ahorros de costes por la reducción del uso de electricidad y productos químicos.