El reto
La zona de Sainctelette-Yser es una intersección caótica en Bruselas que plantea muchos problemas para los usuarios de la vía pública cuando tienen que cruzarla. La situación actual es desagradable e insegura, y necesita reformas.
La zona de Sainctelette-Yser es una intersección caótica en Bruselas que plantea muchos problemas para los usuarios de la vía pública cuando tienen que cruzarla. La situación actual es desagradable e insegura, y necesita reformas.
El hilo conductor del nuevo diseño es, por lo tanto, crear un espacio vital y de reunión en el que los ciclistas y los peatones tengan un papel protagonista.
Estamos convirtiendo Bruselas en una ciudad en la que es agradable caminar y montar en bicicleta, con una infraestructura de transporte que se adaptará a las necesidades del mañana. El comienzo de las obras está previsto para 2022.
En 2017, el gobierno de la Región de Bruselas Capital sacó a licitación la rehabilitación del barrio de Sainctelette-Yser; la zona en cuestión es la intersección entre el bulevar d'Anvers y el bulevar Baudouin. Se trata de una intersección asimétrica en la que convergen diferentes carreteras y usuarios de las vías públicas. Los habitantes de Bruselas también consideran que Sainctelette es la intersección más peligrosa de la ciudad. El nuevo diseño pretende transformar el barrio en un entorno habitable y seguro para ciclistas y peatones.
La licitación la ganó AgenceTer-Karbon y la agencia fue designada, junto con Arcadis, para gestionar el proyecto. La creación de espacios para vivir y reunirse es el hilo conductor del plan. Por ejemplo, la ancha e infrautilizada reserva central verde cerca del nuevo templo cultural Kanal desaparecerá y dará paso a una gran plaza. El puente doble del canal, que une la ciudad de Bruselas con Molenbeek, se ensanchará por ambos lados para crear una explanada para peatones. Bajo el puente, los ciclistas que circulen por el carril bici del canal tendrán su propio cruce, por lo que ya no tendrán que cruzar por el anillo Kleine.
Estamos convirtiendo Bruselas en una ciudad en la que es agradable caminar y montar en bicicleta, con una infraestructura de transporte que se adaptará a las necesidades del mañana. El nuevo diseño dará a Sainctelette-Yser la transformación que necesita y contribuirá a una movilidad sostenible.
Los permisos de obra se solicitaron a finales de 2019 y se prevé que las obras comenzarán en 2020.